Reseña || Marianela, de Benito Pérez Galdós


*Cómo llegó el libro a mis manos:

Fue una recomendación de mi abuelo, que en un verano leyó varias obras de Galdós, y me dijo que quería comentarlas conmigo, pero que empezase con Marianela, que era la más bonita.


*Argumento:

Marianela es una muchacha huérfana de dieciséis años, pobre y fea que vive siendo lazarillo de Don Pablo, ciego de nacimiento, quien siente un gran amor por ella. 
Nela, que es como la llaman, nunca ha sido educada ni valorada por la familia del capataz de los mineros, Centeno, por lo que tiene una autoestima muy baja y cree que la palabras de amor de Pablo sólo suceden porque no la puede ver.
Un día, mientras Pablo camina, se encuentra con un viajero, Teodoro Golfín, médico de la vista. Éste le comenta que quizá pueda operarlo para darle el don de la vista y la vida de todos cambia por completo: sobre todo la de Pablo y Nela.
Cuando Nela se entera de que Pablo va a recuperar la vista, huye porque no quiere que la vea, y decide acabar con su vida, suicidándose en el mismo lugar en el que lo hizo su madre. Sin embargo, Golfín llega a tiempo para detenerla, pues Florentina, la prima de Pablo y su prometida, tiene algo que decirle. Florentina le ha jurado a Dios que si Pablo recupera la vista, ella misma se encargará de cuidar a un pobre como si fuese de su propia sangre, y para ello había elegido a Marianela. Quería darle todos los caprichos, vestidos, libros y objetos que necesitase, haciendo de ella su hermana.
Finalmente, la operación para la ceguera de Pablo es exitosa, y al ver a su prima Florentina, queda completamente enamorado de ella, olvidando las palabras de amor que tanto le decía a Marianela. Sin embargo, quería verla, saber cómo era su amiga del alma. Cuando el encuentro entre ambos sucede, la impresión que resulta en Nela provoca el fin de su vida.


*Crítica:

"Marianela" es un libro que necesité empezar un par de veces antes de poder leerlo del tirón (no alcanza las 200 páginas), porque no estaba acostumbrada a la manera de escribir de Galdós. Durante mi vida académica no me hicieron leer nada suyo (sin embargo de García Márquez sí) y creo que si lo hubiera tenido que leer entonces no lo hubiese disfrutado tanto como ahora, porque posiblemente no lo hubiese entendido o me habría quedado en la capa más superficial de la historia.

La potencia de esta obra son los diálogos. Mediante ellos se puede conocer mucho mejor a los personajes y las relaciones entre ellos que con las meras descripciones (que también son necesarias). Los personajes están muy bien construidos, con una evolución clara. Por ejemplo, Pablo representa el amor por el interior de las personas, hasta que puede ver el exterior. Creo que este tema se puede extrapolar a la actualidad, a las redes sociales: podemos pensar que una persona es bella por sus gustos, su trato, su personalidad, pero luego, si la vemos en persona, quizá no nos parezca tan bella como nos imaginábamos. Creo que Pablo comienza siendo un amante perdido y termina siendo un amante superficial.
Por otro lado está Nela, por quien se siente compasión y empatía sin poder evitarlo. Su historia es triste, pero su ternura y su inocencia son brillantes y le dan a la obra su toque especial.

En conclusión, se trata de una obra que critica la división de clases (el trato que recibe Nela por ser pobre y huérfana por parte de la familia que la acoge: más adinerada, más culta) y las relaciones amorosas, como he comentado arriba.
No he podido evitar llorar con el final, tenía el corazón en un puño.

*Citas destacadas:


Es verdaderamente triste que usted no pueda conocer que ese pedrusco no merece la atención del hombre mientras esté suspendido sobre nuestras cabezas el infinito rebaño de maravillosas luces que pueblan la bóveda del cielo.

Sus labios apenas se veían de puro chicos, y siempre estaban sonriendo, mas aquella sonrisa era semejante a la imperceptible de algunos muertos cuando han dejado de vivir pensando en el cielo.

Nunca se le dio a entender que tenía un alma pronta a dar ricos frutos si la cultivaba con esmero, ni que llevaba en sí, como los demás mortales, ese destello del eterno saber que se nombra inteligencia humana, y que de aquel destello podían salir infinitas luces y lumbre bienhechora.Nunca se le dio a entender que, en su pequeñez fenomenal, llevaba en sí el germen de todos los sentimientos nobles y delicados, y que aquellos menudos brotes podían ser flores hermosísimas y lozanas, sin más cultivo que una simple mirada de vez en cuando. 

-¿A que no sabes tú lo que son las flores?-Pues las flores -dijo el ciego, algo confundido, acercándolas a su rostro- son... unas como sonrisillas que echa la tierra... La verdad, no sé mucho del reino vegetal.-¡Madre divinísima, qué poca ciencia! -exclamó María, acariciando las manos de su amigo-. Las flores son las estrellas de la tierra.-Vaya un disparate. Y las estrellas, ¿qué son?-Las estrellas son las miradas de los que se han ido al Cielo.-Entonces las flores...-Son las miradas de los que se han muerto y no han ido todavía al Cielo. Los muertos son enterrados en la tierra. Como allá abajo no pueden estar sin echar una mitadilla a la Tierra, echan de sí una cosa que sube en forma y manera de flor. Cuando en un prado hay muchas flores es porque allá..., en tiempos atrás, enterraron en él muchos difuntos.

-Estaba pensando que por qué no nos daría Dios a nosotros las personas alas para volar como los pájaros. ¡Qué cosa más bonita que hacer... zas, y remontarnos y ponernos de un vuelo en aquel pico que está allá entre Ficóbriga y el mar!...-Si Dios no nos ha dado alas, en cambio nos ha dado el pensamiento, que vuela más que todos los pájaros porque llega hasta el mismo Dios... Dime tú:¿para qué querría yo alar de pájaro, si Dios me hubiera negado el pensamiento?-Pues a mí me gustaría tener las dos cosas. Y si tuviera alas, te cogería en mi piquito para llevarte por esos mundos y subirte a los más alto de las nubes.

Yo había sido una especie de Colón, el Colón del trabajo, una especie de Hernán Cortés; yo había descubierto en mí un Nuevo Mundo, y, después de descubrirlo, lo había conquistado.

¿De qué modo se retrata el alma en las caras? Si la luz no sirve para enseñarnos lo real de nuestro pensamiento, ¿para qué sirve? Lo que es y lo que se siente, ¿no son una misma cosa? La forma y la idea, ¿no son como el calor y el fuego? ¿Pueden separarse? 

¿Puede el dolor del alma matar de esta manera?

Comentarios

  1. ,e encanto❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤💞💞💞💞💞😀⭐⭐⭐⭐⭐⭐⭐⭐⭐⭐⭐⭐⭐⭐⭐💞💞💞❤⭐❤⭐⭐💞⭐

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