Reseña || El elefante desaparece, de Haruki Murakami

*Cómo llegó el libro a mis manos:
Lo primero que supe de él fue la portada y el título; ahí supe que tenía que leerlo. A raíz de, Pat me regaló un marcapáginas sobre el libro, en el que, según diese la luz, se veía un elefante o éste desaparecía. Encontré el libro en la biblioteca y lo reservé. No pude ir a por él, pero recé para que aún estuviese cuando pudiese ir; y así fue.

*Argumento:
Es un conjunto de diecisiete relatos, cada uno de ellos entre las cinco y las treinta páginas.

1. El pájaro que da cuerda y las mujeres del martes: Un hombre recibe una llamada de una chica misteriosa, quien le pide diez minutos para llegar a un entendimiento sobre sus sentimientos, que termina convirtiéndose en una llamada erótica. Su gato se ha escapado de casa y su mujer le pide que vaya a buscarlo por el vecindario, a la cada del final de la calle, la casa abandonada. De camino, una adolescente le para en su casa diciéndole que el gato pasará por allí, pero no es así. Nunca vuelven a ver al gato.

2. Nuevo ataque a la panadería: En el pasado un chico tuvo que atracar una panadería -el pan se lo regalaron a cambio de escuchar un disco de Wagner-, y desde entonces le persigue una maldición. Su mujer decide que deben atracar una McDonalds, pues no hay ninguna panadería cerca, para romper la maldición.

3. El comunicado del canguro: Es una grabación que un trabajador le envía a una clienta que puso una queja contra un producto de los grandes almacenes. En ésta le habla de canguros, de su trabajo y de que siente atracción sexual por ella, por la clienta, pese a no conocerla.

4. Sobre el encuentro con una chica cien por cien perfecta en una soleada mañana del mes de abril: Un chico se cruza con una chica perfecta para él, pero no le dice nada. Se interrumpe su relato para contar una historia: un chico y una chica perfectos el uno para el otro se cruzan y se ponen a prueba: en un futuro se volverían a encontrar y se casarán. Sufren una enfermedad y no lo recuerdan, así que cuando vuelven a encontrarse no se dicen nada,

5. Sueño: Una mujer con una vida monótona sufre de insomnio. Tuvo una parálisis del sueño que, desde entonces le impide dormir. Así, decide que leerá cada noche sin que su familia se entera de su falta de sueño. Ella cree que ha muerto y que la muerte es no poder dormir. Cuando cogió el coche notó unas presencias que trataban de volcar el coche, ante lo cual se resigna y se rinde a ellas.

6. La caída del Imperio romano. La revolución india de 1881. La invasión de Polonia por Hitler y El reino de los vientos enfurecidos: Entradas de un diario que el protagonista decide escribir en un futuro. Sabemos que ha habido una tormenta, el chico tiene novia, van a quedar en su casa, la tormenta ha pasado, y la pareja ha mantenido relaciones sexuales.

7. Lederhosen: Una mujer japonesa decide hacer un viaje a Alemania y su marido le encarga unos pantalones Lederhosen. Ella va a la mejor tienda y allí le dicen que no venden a menos que quien vaya a ponérselos acuda en persona. Ella les cuenta la situación y deciden que puede traer a alguien con las medidas de su marido. Encuentra a un hombre que se asemeja y mientras le hacen las pruebas de tallaje, se da cuenta de que detesta a su marido y el matrimonio termina.

8. Quemar graneros: Un escritor conoce al novio de una chica que desde que está en la relación no existe como persona independiente. Su novio le confiesa al escritor que encuentra placer en quemar graneros y que tiene pensado quemar uno de la zona. El escritor traza una ruta por los graneros cercanos, pero ninguno arde. Cuando se vuelven a ver, el pirómano le dice que lo quemó muy muy cerca de él. La chica desapareció.

9. El pequeño monstruo verde: Una chica presencia cómo un monstruo entra en su casa. Éste declara que no tiene malas intenciones, pero ella le rita mentalmente, pues así se comunican, y lo expulsa de su casa sin piedad.

10. Asunto de familia: Dos hermanos han tenido siempre buena relación, hasta que ella decide casarse, madurar, y le acusa a él de llevar una vida irresponsable.

11. Una ventana: Una carta escrita por un chico que quiere comerse una hamburguesa simple, pero no lo encuentra. Trabaja como corrector de cartas femeninas. La carta va dirigida a una de ellas, pues será quien le preparé una hamburguesa como él la quiere. Desde entonces, años más tarde, pasa por su edificio para buscar la ventana de la casa de ella, pero todas le parecen iguales.

12. La gente de la televisión: Varios hombrecillos entran en una casa y dejan una televisión. El hombre se siente perturbado por este hecho, pero la mujer parece no darse cuenta de que algo ha cambiado. En su día a día él sigue encontrándose con esos hombrecillos, pero nadie parece verlos. Un día en su casa los hombrecillos lo dicen que su mujer no va a volver porque es imposible.

13. Un barco lento a China: Se nos cuenta cómo el protagonista conoce a varios chinos a lo largo de su vida. El primero fue un profesor del colegio; la segunda fue una compañera de trabajo de quien se enamora, pero nada funciona; el tercero un vendedor de enciclopedias para chinos a quien conoció en el pasado, pero no lo recuerda.

14. El enanito bailarín: El protagonista sueña con un enanito bailarín y le pregunta a su compañero de trabajo (trabaja en una fábrica de elefantes). Le dice que el enanito existió de verdad, que huyó antes de la revolución hacia los bosques. Volvió a verlo en sueños y hacen un trato: el bailarín poseerá su cuerpo para conquistar a la chica que ama, pero mientras no puede hablar; si habla, lo poseerá para siempre. Sale bien, peor desde que lo vieron bailar la policía lo persigue y decide huir al bosque con el enano bailarín.

15. El último césped de la tarde: Cuando era joven el protagonista trabajaba contando céspedes. Su último jardín fue especial, pues la mujer le pidió que registrase la habitación de su hija y crease una idea sobre ella.

16. Silencio: La historia de un boxeador: empezó en la escuela; un día decidió esforzarse en sacar la mejor nota de la clase. y el empollón planteó su venganza: pondría a todo el mundo en su contra. El boxeador le golpeó y ahí todo se torció. Un chico falleció por sufrir bullying y todos pensaron que había sido el boxeador, pero era una mentira contada por el empollón. Cayó en una depresión, pero lo superó pese a sentirse débil y vencido por el miedo desde entonces.

17. El elefante desaparece: El zoo vendió su terreno a una constructora, dejando sólo la jaula del elefante y su cuidador. Una noche el elefante desaparece junto a su cuidador y saltan las alarmas: no hay pisadas, no se ha roto la cadena. El narrador vio cómo ambos, elefante y cuidador, disminuían a tamaño miscroscópico.

*Crítica: 
Es el primer libro-conjunto de relatos que leo de Murakami y he notado dos cosas:
1- Conviene leer otros libros suyos antes de leer éste
2- No hay un hilo conductor entre los relatos (pese a que venda que el hielo conductor es "la sensación de que algo malo va a ocurrir")
Siguiendo el primer punto, hay referencias muy llamativas en los relatos que nos conducen, literalmente, a otras novelas del mismo autor como El pájaro que da cuerda al mundo, Asalto a las panaderías, Sueño, y otras más sutiles como After Dark. Se pueden leer y entender los relatos sin haber leído estos libros, pero me gustaría leerlos antes de de volver (si vuelvo) a éste para disfrutar los relatos, que, a menudo, me han sabido a vacío.
No lo he disfrutado en su totalidad porque, a mitad de la obra, fui consciente de que no había hilo conductor. Hay, con suerte, dos relatos que tienen relación entre sí, cosa que, viniendo de Murakami, personalmente, me sorprende y me decepciona. Esperaba que algo, una señal, me diese la razón, que debía haber una conexión, pero el libro terminó y no fue así. Me sentí un poco triste y, ahora mismo, no tengo la intención de leer ninguno de sus libros de relatos. Al menos hasta que sienta que la decepción desaparece.

*Citas:
De todos modos, la cosa podría empezar con un "érase una vez" y terminar con una pregunta: "una historia triste, ¿no te parece?"

-¿Te acuerdas de un libro de inglés que teníamos en el instituto en el que había una frase que decía: "ha pasado demasiada agua bajo el puente"? (...) Estoy muy de acuerdo con eso. El otro día crucé un puente, miré hacia abajo y recordé de pronto esa frase. Se me vino encima la realidad con toda su solidez, sentí que el tiempo fluía como el agua de ese río.

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